Mario Espinosa de los Monteros Actualizado a 27 de mayo de 2024
Medios italianos aseguran que, durante una reunión privada con más de 200 obispos, el papa Francisco ha indicado que no va a permitir el acceso de homosexuales a los seminarios porque ya había mucho “mariconeo” dentro. Según Repubblica, los propios obispos se han sorprendido de la posición de Bergoglio.
Durante esa reunión, un obispo preguntó al Papa qué hacer cuando un candidato abiertemente homosexual se presenta en el seminario. Bergoglio, que ya había sido claro en otras ocasiones, reiteró que se deben establecer límites para evitar que las personas homosexuales, que podrían llevar una doble vida, accedan al sacerdocio. Fue entonces cuando Francisco bromeó sobre el “mariconeo” que existe en algunos seminarios de Italia.
El papa ha utilizado la palabra frocciagine, que tiene connotaciones despectivas hacia el colectivo. Lo hizo el pasado 20 de mayo durante la asamblea de primavera, cuando aprovecha para intercambiar opiniones de forma franca con la Conferencia Episcopal Italiana (CEI). El papa fue claro: no deben admitirse homosexuales en los seminarios.
La expresión que ha utilizado del papa es extraña porque choca con su habitual posición respecto a los homosexuales y ha llegado a aprobar la bendición a las parejas homosexuales sin equipararlas al matrimonio. “¿Quién soy yo para juzgarles?”, se preguntó en aquella ocasión.