
por Javier Arias | 27 septiembre, 2024
Archidiócesis Madrid / Iglesia española
El sacerdote Marcos Galvis es ampliamente conocido especialmente por la comunidad Hispanoamericana.
Este padre Galvis fue ordenado sacerdote en octubre del 2016 con 27 años. Es un referente entre la comunidad online católica. Desde su canal de Youtube, retransmite la Misa desde su casa y hace comentarios al Evangelio.
Su labor evangelizadora llega a numerosos rincones debido a la gran cantidad de seguidores que acumula. Tiene 240.000 seguidores en Instagram, más de 183.000 en Facebook y 933.000 en YouTube.
Desde este verano, el sacerdote ha recalado en Madrid junto con otros dos sacerdotes venezolanos para completar sus estudios. En los nombramientos que hizo el cardenal Cobo el pasado mes de julio, le nombró adjunto en la parroquia Santa María la Mayor y San Julián.
Pero la llegada de este sacerdote con cientos de miles de seguidores en redes sociales en Madrid parece haber sido algo accidentada. A través de un vídeo de algo más de una hora de duración, el sacerdote Marcos Galvis denuncia que está siendo silenciado desde que llegó a Madrid y que un grupo de 30 curas tratan de hacerle «la vida imposible».
El sacerdote cuenta que le llamaron desde el arzobispado para una reunión con él en la que le pidieron -según el sacerdote- que dejara de grabar porque en Madrid está prohibido grabar misas y no se debe hacer».
Desde la archidiócesis de Madrid han matizado a InfoVaticana lo ocurrido y niegan que estén tratando de silenciar a este sacerdote. Desde el arzobispado madrileño aseguran que lo único que han hecho es pedirle al sacerdote que no retransmita «las Misas domésticas», es decir, las que graba en su casa, en base «a las normas eclesiásticas y litúrgicas dispuestas por la Conferencia Episcopal Española».
El arzobispado aclara que si bien todo esto se flexibilizó -como no podía ser de otra manera- durante la pandemia, ahora se busca fomentar la presencialidad por lo que han aconsejado al padre Marcos Galvis que se abstenga de retransmitir sus Misas por YouTube. Sin embargo, desde la archidiócesis recalcan que puede seguir difundiendo sus predicaciones y comentarios del Evangelio ya que no se le ha censurado. Solo le han pedido que deje de retransmitir las «Misas domésticas», recalcan desde el arzobispado de Madrid a InfoVaticana.